Recuerdos de vacaciones de nuestro equipo

Después de un bonito verano, ya estamos preparándonos para el otoño y los meses invernales. Esperamos que hayas disfrutado de un bonito verano, gracias a nuestros consejos de viaje!
Para terminar la temporada veraniega y asimismo nuestra guía de viaje, quisiéramos compartir nuestras experiencias de viaje contigo.

Bart: “Hace unos meses, fui con unos amigos a Francia, a la aérea ‘Ardeche’, donde está nuestra casa de vacaciones, rodeada de bosques, rocas y barrancas. En un día veraniego, fuimos al arroyo para nadar y relajarse. Al acordarse un viaje que había hecho cuando era pequeno, decidí hacerlo de nuevo con mis amigos. Pues, en principio, todo empezó muy tranquilo y con mucho humor, pero poco a poco perdimos el gusto. Mejor dicho, perdimos el camino, soltamos en arroyos peligrosos y caminamos casi tres horas en un sol ardiente. Afortunadamente, al llegar (por fin) a un camino normal, encontramos uno de nuestros amigos, paseando unas horas en coche en búsqueda de nosotros. Nos dijo que estaba a punto de recurrir a servicios de asistencia! Según sus palabras, parecíamos unos viajeros perdidos en el desierto de Sahara. Y para ser sincero, nos sentíamos así! Un camino como este, nunca más!”

Arjen: "Vacaciones de verano en Grecia: garantiza normalmente sol, mar, playa y cócteles. Desgraciadamente, en el último día de las vacaciones, todo se convirtió en una pesadilla.
Por cualquier razón, la cena no me cayó bien. No sabía porqué. Tal vez una mala preparación de gyros? Como sea, la verdad es que unas punzadas estropearon el último día de vacaciones. El próximo día fuimos al aeropuerto local para regresar a Holanda. Pasé con una sonrisa forzada la puerta de control, pero el viaje fue sinceramente terrible.
Una vez en Holanda, decidí hacer una visita al hospital, donde me comunicaron directamente que esas punzadas no tenían nada que ver con una mala preparación de pasta o gyros. Unas horas después, estaba preparándome para una operación de apendicitis...  Entonces, no fue una vuelta planeada, sí bastante memorable!

Elina: "Mi gira hacia la costa oeste de los Estados Unidos en 2012 es sin duda alguna mi recuerdo más memorable. Al llegar a Las Vegas, decidimos hacer una excursión, por supuesto, al “Grand Canyon”. Este viaje en los Estados Unidos contenía todo: riquezas de la naturaleza, como ciervos, aves de rapiña, y unas golosinas riquísimas como donuts, panqueques y obleas de desayuno. Si pienso en malas experiencias durante las vacaciones, diría un retraso de vuelo de 4 horas en el aeropuerto de Miami (en un sol ardiente) y bichos en un hotel en Francia.”

Mario: "Hace unas semanas estuve un fin de semana en Edinburgo. Y no se puede hacer una visita a Escocia sin probar ‘Haggis’. Para ser sincero, pensé que sería algo asqueroso. Sin embargo, a mi asombro, fue sinceramente riquísima! Como carne picada, si bien no me di cuenta que estaba comiendo un estómago de oveja. Por lo demás, Edinburgo es una ciudad muy linda y vale la pena para visitar! Gente muy linda, edificios antiguos, en una palabra, una gran sorpresa!"

Raymond: "Estábamos en Escocia, muy cerca de Rua Reidh Lighthouse y listos para hacer un camino a la  costa. Según la predicción del tiempo, no sufriríamos muchos problemas durante el viaje, si bien nos habían comunicado que podría llover o nevar en cualquier momento.  Al caminar por los bosques y arroyos, avistamos a una playa, no tan lejos. Sin embargo, esa playa estaba ubicada en un valle, sólo accesible vía una catarata seca."
Una vez llegado, la playa era totalmente abandonada y llena de basura. Zapatos, barriles, redes de pesca, etc.  De repente, el cielo rompió y litros de agua de lluvia cayeron en la tierra. “Cats and dogs” se diría en Escocia. Nos veíamos obligados a salir de la playa lo más pronto posible. Para ello, teníamos que subir unas montañas.. Sin embargo, cómo es posible caminar sin buena vista? Por fin, llegamos a un despeñadero, que sería afortunadamente nuestra salvación."

Tom: "Hace unos años estuve con amigos en la ciudad italiana Sienna. Había un chubasco muy fuerte y teníamos que ir a una plaza central. Sin embargo, no sabíamos el nombre exacto de esa plaza.
Entonces, según uno de mis amigos, la manera más eficaz sería hablar con los ciudadanos para averiguar el nombre de esa plaza. Cabe mencionar que se traduce la palabra “plaza” como “plein” en holandés. A su vez, “plein” suena como “plane” (avión). Por lo tanto, una vez hablando con los ciudadanos, la gente pensaba que éramos locos, preguntando cada vez dónde está el avión....  Al final, no encontramos unos aviones, sino la plaza local, para nuestra suerte.